Hoy, Día de los Enamorados, del Amor y de la Amistad, se observa ONE BILLION RISING, la manifestación colectiva en todo el planeta en contra de la violación sexual y la violencia de género. En 202 países se unen las mujeres y los hombres a estas manifestaciones de danza, canto, marchas, festivales, y toda suerte de colectividad para resaltar este flagelo en cada comunidad, país, en el planeta. Lo inició Eve Ensler, autora de Diálogos de la Vagina, hace 15 años, y se ha expandido como una gran sombrilla de esperanza y de apoyo al 51% de la población mundial. Es día de manifestar la indignación ante el atropello, y de comprometerse a luchar de cualquier manera a favor de las mujeres y las niñas.
La Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer reconoce la desigualdad entre hombres y mujeres, y fue adoptada por la Asamblea General de ONU en 1993. La Declaración sostiene que: Todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada, constituye específicamente violencia de género.
En la Declaración también se incluyen la violencia física, sexual y psicológica que se produzca en la familia y en la comunidad, incluidos los malos tratos, el abuso sexual de las niñas, la violencia relacionada con la dote, la violación por el marido, la mutilación genital femenina y otras prácticas tradicionales nocivas para la mujer; la violencia perpetrada por otros miembros de la familia; la relacionada con la explotación; el acoso y la intimidación sexuales en el trabajo, en instituciones educacionales y en otros lugares; la trata de mujeres; la prostitución forzada, y la violencia perpetrada o tolerada por el Estado.
Violencia en Cuba es, hoy por hoy, el arresto arbitrario de mujeres opositoras; el hostigamiento y la violencia verbal y física que sufren las Damas de Blanco a lo largo y ancho de la isla por parte de las Brigadas de Respuesta Rápida que moviliza el gobierno cubano; la muerte de la opositora pacífica Laura Pollán, causada indirectamente por los golpes sufridos en un acto de repudio; el arresto sin instrucción de cargos de la activista afro-descendiente Sonia Garro, que permanece en prisión; el acoso a las blogueras independientes, y particularmente el que recibe Yoani Sánchez; las presiones que el régimen impone sobre juristas como Laritza Divergent y otras colegas, por defender los derechos ciudadanos que rezan en la Constitución de la República; el bloqueo económico interno del propio régimen socialista que tiene hundido en la miseria al pueblo y obliga a muchas cubanas a prostituirse a precio de quincalla con el extranjero que llega a nuestras costas.
¡La indignación toca ahora! ¡Manifiéstate! ¡Unete a los/las mil millones de personas que hoy celebrarán colectiva y públicamente los derechos y la vida para decir NO a la violencia contra mujeres y niñas en este violento -pero siempre mejorable- mundo.